Un informe desarrollado por UNICEF Ecuador a través de la encuesta ENCOVID, señala que la pandemia ha afectado a todos los hogares de distintas maneras y magnitudes, y en particular a aquellos con niñas, niños y adolescentes.
Para monitorear e informar sobre su situación ante la crisis socioeconómica derivada del impacto del COVID-19 en el Ecuador, UNICEF desarrolla periódicamente la encuesta ENCOVID, analizando diferentes dimensiones del bienestar relacionadas con la salud integral, la economía de los hogares, la seguridad alimentaria, el cuidado y la educación.
Según los resultados del estudio, a febrero de 2022, 6 de cada 10 hogares con niñas y niños afirmaron que uno o más miembros de la familia tuvo COVID-19 o presentó síntomas. En el caso de los hogares sin niños, esto sucedió en 5 de cada 10 familias. Esto representa el doble de los resultados de la primera ronda. Por otro lado, una mayor proporción de hogares accedieron a pruebas para detectar COVID-19 en febrero de 2022: 57% respecto a octubre de 2020, cuando la cifra fue 48%.
El 33% de los hogares optan por el cuidado en casa o por no recibir atención. En caso de recibir atención médica, el 46% de los hogares prefieren el servicio privado de salud. A pesar de los desafíos que enfrenta el sistema de salud y la interrupción de algunos servicios debido a la pandemia, existen mejoras. Son menos los hogares que dejaron de recibir atención de salud (de 13% en 2020 a 8% en 2022). Además, el acceso a la vacunación infantil mejoró, especialmente en los hogares de nivel socioeconómico bajo y con inseguridad alimentaria severa, llegando a niveles por encima del 90%, señaló UNICEF.
En cuanto a empleo y estrategias para enfrentar la crisis, en 2022, la pérdida de empleo continúa afectando más a los hogares con niñas y niños (52%), por encima del promedio nacional (43%) y de la proporción de hogares sin niños (32%). Esto produce una recuperación económica lenta y desigual. Casi 8 de cada 10 hogares con niños y niñas reportó tener menos ingresos, mientras que en los hogares sin niños esto ocurrió en 6 de cada 10. Esta tendencia se ha mantenido desde 2020.
Similar a los resultados de rondas anteriores, aproximadamente 4 de cada 10 hogares cree que es más probable que sus ingresos se reduzcan en los próximos 3 meses. A febrero de 2022, un mayor número de hogares considera más probable que pierdan el empleo (de 33% a 42%). Para afrontar la crisis, pedir préstamos a sus familiares o amigos es la principal estrategia de supervivencia de los hogares (57%), después de dejar de comprar medicamentos, no pagar renta, servicios básicos o deuda. Además, la migración se mantiene como una alternativa para enfrentar la crisis, primordialmente entre los hogares con niñas y niños y los hogares urbanos con educación superior.
Mientras, en lo que se refiere a la inseguridad alimentaria, ésta no disminuye del 48%, aumentando sustancialmente en los hogares con niñas y niños de estrato bajo (de 68% a 79%) y medio bajo (de 63% a 73%).
En otros indicadores, casi 4 de 10 hogares con niñas y niños recibieron apoyos de programas sociales (como el Bono de Emergencia, Bono de Desarrollo Humano, entre otros) cerca del doble que el primer año de la pandemia. De igual forma, más hogares con niños y niñas menores de 5 años reciben alimentación complementaria (de 34% a 53%) y acceden a servicios públicos de desarrollo infantil o educación inicial (de 30% a 38%).
La madre sigue siendo la principal persona encargada del cuidado de niñas y niños menores de 4 años (75% de hogares). El nivel de educación y el estrato socioeconómico de la madre son factores que exacerban esta situación.
El aprendizaje presencial ha aumentado lentamente entre octubre 2020 y febrero 2022 (de 0.8% a 24% en hogares con niñas y niños de 5 a 11 años y de 0.9% a 31% entre hogares con adolescentes de 12 a 17 años), aun así, la modalidad virtual o híbrida es el medio fundamental para la enseñanza de las niñas, niños (85%) y adolescentes (90%).
Con el retorno progresivo a la educación presencial, los resultados muestran un descenso en el abandono escolar en los hogares con niñas y niños (de 9% en la primera ronda a 3% en la última ronda) y adolescentes (de 8% a 5%).
Entre las dificultades de acceso a la educación, se encuentran la falta de dinero, el acceso a internet y significativamente las brechas en el acceso a un computador entre los hogares con niños y niñas de los estratos bajo. En los hogares con niñas y niños de 5 a 11 años del estrato socio económico bajo apenas el 10% tiene acceso a un computador, mientras que el 74% lo tiene en el estrato alto.
En salud mental, el total de los hogares perciben que los conflictos en el ambiente familiar han disminuido desde 2020, de 23% a 17%. En los hogares con niñas, niños y adolescentes, la situación disminuyó de 25% en 2020 a 18% en 2022. A febrero de 2022, 7 de cada 10 hogares reportan que sus niños y niñas han sufrido al menos una situación emocional, siendo las más habituales percibirlos tristes y sin ánimo, agresivos o tercos y tener nuevos miedos. Esta situación se mantiene a lo largo de todas las rondas.
Fuente Unicef Ecuador, encuesta Encovid
